Vistas de página en total

lunes, 9 de mayo de 2011

Solo cuando tienes 18 la vida puede ser mejor que una canción




Después seguiremos teniendo un otoño lluvioso, amigos del corazón y del tiempo, pero ahora nos toca la recompensa del dulce sol. Aprovechen sus rayos, y como el cielo, amigos del tiempo, abran su pecho a la luz. Es nuestra vida, es nuestro tiempo.






Arranca el verano, suban queridos amigos de las ondas radiofónicas, suban al carrusel, no se pierdan ninguna vuelta de la noria. Saltemos al vacío para recordar el vértigo de otro tiempo, todavía los sueños eran un latido de vuestro corazón, la seda del aire os acariciaba la piel, si arranca el verano y ellos aún piensan que desde ese camino perdido de los ingleses alcanzarán una suma de gloria, piensan que desde allí verán las costas de África.

No, nunca, desde ninguna terraza, desde ningún mirador, ni faro ni azotea, vimos las costas de África. Pero allí, detrás del horizonte, siempre intuimos el fulgor de lo desconocido. El reflejo de la vida que, quien sabe, quizás jugando en otra ruleta, habríamos podido alcanzar.
Las costas de África, el otro lado del mundo.








Las cosas jamás salen como siempre hemos esperado o deseado, pero suceden y hay que aceptarlas tal y como nos vienen.

Una vez paseando por las Ramblas de Barcelona un ilusionista me dio un papel en el que decía:"Acepta el destino y jamás busques cambiarlo, porque no se puede”. En ese momento no lo entendí, pero en vez de hacerlo una bola y tirarlo a esa larga calle enormemente transitada dónde en papel más o menos no importaría, lo guarde en mi cartera y años después lo encontré y si ahora lo entiendo.
La vida no dura eternamente y aunque hay que llevar un orden...LA VIDA ES MÁS BONITA CUANDO LA HACEMOS DESORDENADA.



A.C.G

No hay comentarios:

Publicar un comentario